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10 de septiembre de 2018

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Describir Symphony of the Seas es una tarea difícil. No es sólo el tamaño lo que sorprende, más de 228.000 toneladas brutas sobre 362 metros de largo, sino el increíble número de salas y atracciones que encontrarás a bordo. Una verdadera ciudad flotante donde no te aburrirás ni siquiera un momento, con todas las comodidades y servicios posibles que existen hoy en el mar. CruisingJournal intenta hacerte experimentar un breve viaje virtual, consciente que conocer realmente a este gigante de los mares no sería suficiente para un crucero durante toda una semana.

Comencemos con todo lo que hay a bordo que te provocará el efecto “WOW”, que se ha vuelto el caballo de batalla de Royal Caribbean. ¿Quién no desearía tomar un café en el Rising Tide Bar? Una plataforma que desde Royal Promenade asciende al Central Park y lentamente desciende, en intervalos de tiempo, transportándote entre el animado bulevar interno y el relajante parque al aire libre. Siempre en el Promenade, es obligatorio hacerse preparar un cóctel hecho por un camarero… robot. La Bionic Bar te permite elegir tu bebida favorita y verla preparar automáticamente por el brazo mecánico. Sube luego al puente 6 y avanza hacia la popa. Atravesarás la espléndida BoardWalk, pasará el Carousel, un hermoso tiovivo con caballos, para llegar al espléndido Aquatheatre, un anfiteatro en el mar que acoge espectáculos de buceo realmente sorprendentes.

Si desde allí levantas la vista sentirás un escalofrío a la sola idea de dejarte resbalar dentro el Ultimate Abyss Slide, un tobogán empinado que desde los puentes más altos del barco te hará literalmente precipitar hasta el BoardWalk. No es necesario desplazarse mucho para pronunciar otro “WOW”… A ambos lados del Aquatheatre verás paredes sobre las cuales trepar, los Rock Climbing Wall, y sobre tu cabeza verás personas que se lanzan de un lado al otro del barco a lo largo del Zip-Line, suspendidos en el vacío.

El mismo Central Park  no puede dejar de sorprenderte. Miles de plantas, que esconden bancos, salas e incluso gnomos… Un rincón de verdadera naturaleza verde en el medio del mar, logrando que esta zona sea realmente única y especial, desde la mañana temprano hasta el paseo antes de ir a dormir.

Son ciertamente “WOW” también los dos FlowRiders a popa del puente 15, donde aprenderás a surfear en olas reales y decididas, así como la Beach Pool, una especie de playa con tumbonas y sombrillas “en la orilla”, que desciende lentamente hacia el agua. The Perfect Storm Waterslides  representa la atracción acuática por excelencia: una serie de toboganes y juegos sugestivos que se desarrollan desde el puente 15 hasta la proa del puente 18. No todo el mundo tiene la suerte de asistir a un sugestivo espectáculo de patinaje sobre hielo en el medio de un transatlántico… En Symphony of the Seas no solo puede suceder, sino que en el Center Ice Rink  podrás patinar en una verdadera pista de hielo.

No es solo el tamaño y las atracciones lo que hace que Symphony of the Seas sea única. Se habla incluso de un barco que ofrece entretenimiento de todo tipo, que ofrece numerosas salas de todo tipo, con música diferente, desde la más animada a la más relajante.

La misma Royal Promenade es una verdadera avenida rica de lugares donde pasar el tiempo desde el desayuno hasta altas horas de la noche. Partiendo del inmenso Royal Theatre, en la proa, se encuentran el Boleros, casa del latino-americano, y, en frente, el On Air Club, súper moderno, a menudo dedicado al Karaoke. Los separa Starbucks, el icono del café estadounidense, con una serie de cappuccinos y otras especialidades realmente deliciosas.

Continuando el paseo por el Promenade, encontrarás la pizzería Sorrentos, siempre llena con diferentes especialidades de pizza, y el animado English Pub, con mesas “en la calle” y una amplia y acogedora sala interna. Un poco más adelante el Cafè Promenade representa el punto de referencia para aquellos que tienen hambre a cualquier hora, abierto las 24 horas. Cierran el Promenade, antes de llegar al Restaurante principal, la Reception, el Bionic Bar, el Next Cruise y el Riding Tide Bar.

La Promenade es naturalmente el lugar ideal también para ir de compras, aunque si algunas boutiques de prestigio se encuentren incluso en el Central Park. Otros servicios se encuentran en el puente 6, con vista al Promenade: la Oficina de Excursiones, el Focus, la Picture This, la galería de fotos y el Loyalty Desk. Bellísimo e infaltable a bordo del Royal, el Schooner Bar, elegante y acogedor, te hará sentir a bordo de un grande velero. En la proa en cambio se accede al Vitality at Sea Spa & Fitness Center, que ocupa incluso zonas del subyacente puente 5. Grande, moderno, un Spa que representa una pequeña ciudad en la ciudad, comenzando por el Vitality Café donde es agradable detenerse y beber infusiones y tés de hierbas sin tener que entretenerse en entrenamientos o tratamientos.

Antes de subir a los puentes altos, llenos de maravillosas atracciones y salas, un paso atrás en los puentes 3 y 4, debajo del Royal Promenade. El primero alberga un amplio Conference Center y, en la popa, la sala más baja del inmenso Main Dining Room. En el puente 4 se encuentra en cambio el Royal Theatre en la proa, a la salida del cual se encuentra la discoteca, The Attic, y un club dedicado al Jazz, de hecho Jazz on 4. Reservado a los miembros, el Diamond Club ofrece privacidad y relax, y representa una excepción en el medio de Entertainment Place. El Central Ice Rink, con StudioB, representa otra exclusiva de Royal Caribbean, y los espectáculos realmente sensacionales se agotan durante los cruceros.

Dos pasillos a ambos lados del Central Ice Link  se encuentran decorados con cuadros y otras obras de la Art Gallery, e introducen al gigantesco Royal Casino una pequeña Las Vegas a bordo. Una verdadera diversión para los amantes del juego pero también un lugar muy animado en la noche, atendido por el bar central con mesas y sillones. La parte de popa está ocupada por el piso intermedio del Main Dining Room.

La BoardWalk, ubicada en el puente 6, ofrece no solo el espectacular tiovivo de caballos, el Carousel, sino también tiendas (los más golosos se volverán locos en el Sugar Beach), restaurantes y muchos videojuegos. El Playmakesrs Sportsbar & Arcade es el lugar perfecto para degustar alitas de pollo y otras especialidades mientras miras programas deportivos o juegas con amigos.

En los puentes 8 y 9 de popa se desarrolla el Duzzles, una elegante sala donde escuchar música en vivo por la noche y se transforma en uno de los locales más de moda para después de la cena. La vista sobre la BoardWalk es espectacular desde el gran ventanal que incluye ambos puentes. En el puente 14 se encuentran zonas para los más jóvenes en la proa, Adventure Ocean, el Centro Médico y, hacia la popa, la Card Room, también utilizada como sala de reuniones.

Subimos más alto, al puente 15, para descubrir el maravilloso Solárium de proa. Un lugar luminoso y moderno, lleno de rincones donde puedes relajarte entre un hidromasaje y otro, con una hermosa vista a 270° sobre la proa. La zona es atendida por el Solarium Bistro y el Solarium Bar y se extiende en parte incluso al puente de abajo, el 14, con una hermosa vista sobre la proa. En el centro del barco se encuentra la zona sol con dos piscinas, Main Pool y Beach Pool, con los relativos Bar, Pool Bar e Sand Bar, y una serie de juegos acuáticos como The Perfect Storm Waterslides y Splashaway Bay.

En la parte central del barco, todavía en el puente 15, se encuentra la Fuel Disco, reservada para adolescentes, The Living Room, centro de medios y reunión, un zona Ping Pong y El Loco Fresh, con especialidades y aperitivos. Finalmente, en la popa, la zona deportiva, con los FlowRiders, el Mini Golf, el Sports Court. Para aquellos que no quieran cansarse, el Wipeout Bar, en el puente superior pero con vistas a la zona, es el lugar ideal para disfrutar de una bebida con espectáculo en la estela de popa.

En el puente 17, en la zona de proa, un amplio espacio es reservado para los huéspedes de la Suite, con bar, tumbonas y alcobas.

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Hemos pasado por alto los numerosos restaurantes y puntos de restauración para reunirlos ahora en una revisión rápida, siendo tan amplia la opción que describir uno por uno sería realmente difícil. Bellísimo y escenográfico el Restaurante principal, Main Dining Room, con tres puentes divididos entre My Time Dining y los dos turnos clásicos. Algunos de los restaurantes más prestigiosos se encuentran en Central Park: el Chop’s Grill, reino indiscutido de la carne y del Surf and Turf, el 150 Central Park, probablemente el más lujoso a bordo. Un poco más adelante, también escondido entre plantas y bancos, el Jamies’ Italian que ofrece excelentes fiambres y especialidades de la Península, y el Park Café, ideal para ensaladas, sándwiches y aperitivos. Si te encuentras en la zona, no te pierdas la oportunidad de disfrutar de un aperitivo inmerso en la naturaleza… en el Trellis Bar o una copa de excelente vino en el Vintages, vinoteca con excelentes etiquetas.

Pero estamos sólo en la mitad de las ofertas gastronómicas a bordo… En el puente 12 vivirás una de las experiencias más extravagantes: el Wonderland. Siéntate entre altas copas de colores, sillas extrañas y un excelente menú, todo sazonado con una hermosa vista sobre el Central Park. En el puente 15 hemos ya mencionado el Solarium Bistro, un ambiente encantador y acogedor ubicado en la proa del barco, con mesas tanto internas como al aire libre, así como El Loco Fresh, un lugar ideal para un aperitivo por la tarde.

El puente 16 ofrece el inmenso Windjammer Cafè, el bufé principal lleno de islas y de especialidades, renovadas a diario. En la proa se encuentra el nuevo restaurante Hooked Seafood con especialidades a base de pescado incluso crudo, en un ambiente muy luminoso y animado en estilo marinero. Finalmente, en el puente 17, con vista desde lo alto del barco, el Coastal Kitchen representa otra alternativa, abierta desde el desayuno hasta la cena, justo al lado de la Suite Lounge.

En el Cafè Promenade y en el Sorrentos encontrarás bocadillos y pizzas a casi todas las horas del día y de la noche. En la BoardWalk las tentaciones son múltiples, desde la Dog House hasta el famoso Johnny Rockets y las especialidades del Playmakers Sportsbar.

En un barco como este de clase Oasis, las tipologías de cabinas son muy numerosas. Desde la interna al balcón, desde la vista Promenade a la vista Central Park, desde las Suites al Loft y hasta verdaderos apartamentos. Cuestiones de gustos y de billeteras, sin embargo existe seguramente una solución para todos.

Symphony of the Seas representa la última generación de cruceros, a la vanguardia de la innovación, pero capaz de ofrecer incluso ideas para un crucero clásico, en nombre de la excelente gastronomía y de la diversión. A pesar de la inmensidad de los espacios, siempre es posible disfrutar de ambientes en contacto con el mar y aprovechar el servicio de Royal Caribbean, siempre atento y cordial. El número de pasajeros a bordo, realmente impresionante, en la mayoría de las ocasiones no crea ningún inconveniente, siendo la distribución de los espacios y la grandeza de las salas  muy bien estudiadas.

Tal vez no sea un barco para todos, pero donde todos sabrían seguramente lograr su propio espacio para disfrutar de la navegación por un lado y del milagro de la ingeniería por el otro.

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Gabriele Bassi

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