Ponant obtiene la certificación Green Globe
Con orgullo, la compañía francesa Ponant anuncia que todos sus barcos han obtenido la certificación Green Globe, el reconocimiento al compromiso de la compañía con un turismo más responsable.
“La certificación Green Globe, un estándar global en la industria turística, es un elemento clave de nuestro compromiso de asegurar la responsabilidad por nuestras acciones. Es importante para nuestros huéspedes y también para continuar alentando a toda la industria marítima a realizar su transición ambiental”, explica Wassim Daoud, responsable de RSE y sostenibilidad de Ponant.
Continúa: “Lo que distingue a esta certificación es que se basa en la mejora continua. Mientras que nuestro objetivo este año era obtenerla, el desafío principal en los próximos años será mantenerla”.
La certificación Green Globe se ha otorgado a todas las cuatro hermanas de la serie Le Boréal, a los seis Ponant Explorers, Le Commandant Charcot y al yate a vela Le Ponant. Este resultado premia el compromiso de todos los equipos de Ponant en los últimos años para reducir su huella ambiental y contribuir a un turismo más sostenible.
Desde 2019, toda la flota utiliza gasóleo marino de bajo contenido de azufre (LS-MGO) con un contenido de azufre inferior al 0,05%, 13 veces menor que los estándares marítimos actuales, limitando significativamente su impacto atmosférico. Ponant fue la primera compañía de cruceros en el mundo en abandonar el fuelóleo pesado y respaldar a las autoridades internacionales que abogan por la expansión del área de control de emisiones de azufre (SECA) a todos los océanos, como la Declaración de Roma.
Siguiendo el mismo objetivo de reducir las emisiones atmosféricas, Ponant también se comprometió a equipar toda su flota con sistemas catalíticos para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) y sistemas de conexión de energía a tierra en los puertos, lo que significa que los motores pueden apagarse. Ambas tecnologías se implementarán completamente antes de finales de 2026. Ponant tiene como objetivo reducir sus emisiones de CO2 en un 30% con respecto a 2018 por cada día de crucero hasta 2030.
La empresa también ha avanzado significativamente en la reducción de la producción de residuos: desde 2021, se implementó una estrategia para eliminar gradualmente los plásticos de un solo uso mediante el uso de unidades de filtración Nordaq, que hacen potable el agua de mar. Una vez tratada, el agua potable se distribuye a través de dispensadores de agua o en botellas de vidrio reciclables, que se encapsulan directamente a bordo.
En 2022, esta estrategia evitó casi 390,000 botellas de un solo uso, equivalente a cinco toneladas de plástico, en comparación con 2019. La empresa también revisó todas sus operaciones a bordo para eliminar otras fuentes de residuos de plástico y continúa persiguiendo el objetivo de cero plástico de un solo uso para 2024.
Ponant presta mucha atención a su impacto en las comunidades locales y se esfuerza por construir conexiones con personas que van más allá de las transacciones comerciales: una misión de reconocimiento en el archipiélago de Bijagós en Guinea-Bissau resultó en un programa para reconstruir la escuela en la aldea de Anipoc en la isla de Caravela, financiado por la Fundación Ponant. Esta área aislada ha sido reconocida como reserva de la biosfera por la UNESCO desde 1996.
Después de encontrarse con la Fundación Escama, que ha trabajado con la población local durante varios años, Ponant decidió involucrarse en el proyecto para marcar realmente la diferencia para los cien estudiantes de la escuela y aproximadamente 200 adultos, que ahora se benefician de programas de alfabetización. Además de los trabajos de construcción, la Fundación Ponant también financia los salarios de los maestros, mientras que la comunidad se organiza para brindarles apoyo local.
También se pone mucho énfasis en la gestión ecológicamente responsable de la escuela, incluida la selección y reciclaje de residuos, el acceso a agua potable limpia y la electricidad generada por energía solar.
Lanzado en 1998, el Green Globe International Standard for Sustainable Travel and Tourism es reconocido por el Global Sustainable Tourism Council y es una certificación reconocida a nivel internacional. El proceso de certificación se realiza anualmente por un revisor independiente acreditado. La sostenibilidad de las operaciones comerciales se evalúa en función de 44 criterios y 380 indicadores organizados en torno a cuatro pilares: gestión sostenible, desempeño social y económico, patrimonio cultural y ambiente. Green Globe es miembro afiliado de la Organización Mundial del Turismo.
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