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13 de febrero de 2024

Costa Crociere, nuevamente este año, fue protagonista con Costa Smeralda en el Festival de Sanremo, uno de los eventos musicales más esperados y queridos por todos los italianos y más allá.

El crucero-evento se dividió en dos fases, una pre-Sanremo del 3 al 7 de febrero y otra durante el Festival del 7 al 11 de febrero, brindando así la oportunidad a todos los huéspedes de vivir solo una parte o todo el crucero.

Una vez a bordo, ya se respiraba un ambiente festivo, todos los huéspedes estaban ansiosos por vivir la magia de Sanremo desde una perspectiva totalmente diferente que, sin embargo, nos permitiría experimentarlo plenamente.

Durante los días previos a Sanremo, participamos en diversas actividades, de alguna manera todas relacionadas con la música y, por lo tanto, con Sanremo. Sin duda, una figura central fue Ernesto Assante, periodista, crítico musical y bloguero italiano, que durante varios días celebró encuentros en el Coliseo de Costa Smeralda, contándonos cada día un fragmento de la historia de la música desde los años 80 hasta la actualidad. Otra actividad relacionada con la música tuvo lugar en el ámbito deportivo, ya que a bordo estaban presentes instructores de Technogym que nos brindaron sesiones de entrenamiento en la hermosa Plaza de España, al ritmo de la música de los años 70, 80, 90 y 00, dedicándose cada día a una década diferente.

Además de estas citas diarias, vivimos eventos únicos e increíblemente emocionantes como la Apertura de Sanremo. De hecho, el 4 de febrero, mientras Costa Smeralda iluminaba su escenario flotante con juegos de luces, a lo largo de la costa de la ciudad de Sanremo se llevó a cabo un espectáculo de fuegos artificiales acompañado de canciones italianas que habían tenido éxito a lo largo de la historia del Festival de Sanremo. Un evento emocionante que concluyó con una conexión virtual entre el Teatro Ariston y Costa Smeralda gracias a luces láser que se encontraban en el cielo.

Después, un espectáculo exclusivo a bordo esperaba a todos los huéspedes en el Teatro Sanremo, con “ma…diamoci del tu”, donde Enrico Brignano hizo reír a toda la audiencia ironizando sobre la vida en pareja, pero también sobre la vida a bordo que ciertamente afectaba a todos los huéspedes presentes en primera persona. Finalmente, durante este primer día a bordo, otro punto culminante fue sin duda el Vanity Fair Opening Party, con una fiesta en vivo que animó todo el Teatro Sanremo, que como ya sabemos tiene la capacidad de transformarse de teatro a un ambiente perfecto para fiestas.

En los días siguientes, además de las actividades ya mencionadas, tuvimos la oportunidad de participar en una Masterclass By Aperol Spritz, que involucró a varios invitados y les dio a todos la oportunidad de aprender a preparar un Aperol Spritz perfecto, gracias a las proporciones adecuadas, al orden de inserción de los ingredientes y, sobre todo, al método de preparación. En Sanremo, por supuesto, no podían faltar las flores, y gracias al Flower Lab, con la ayuda de expertos floristas, aprendimos a crear una composición floral adecuada, pero, sobre todo, nos explicaron cómo hacer que las flores duren más. Y, finalmente, el Photo Lab by Canon, un interesante taller de fotografía con los profesionales de Canon Italia, para aprender a tomar las mejores fotos en un crucero, desde retratos hasta comida.

Nuestras noches esperando a Sanremo fueron llenas de un Flower Party de los años 70 y el Dj Party by Rolling Stone que hizo que todos los amantes del rock se desataran al ritmo de los éxitos más legendarios.

Llegado el gran día, Costa Smeralda entró oficialmente en escena, brindándonos una experiencia increíble al presenciar el espectáculo en vivo desde el Beach Club a bordo del escenario flotante preparado para la ocasión. A bordo se presentaron cuatro grandes artistas de la música italiana e internacional. De hecho, Costa Smeralda, gracias a las conexiones con el Teatro Ariston de Sanremo, tuvo como invitados a Tedua, que brilló durante las noches de apertura y clausura del festival de Sanremo, Bresh, rapero italiano, que nos emocionó con su canción de amor, Bob Sinclar, que nos hizo bailar con los mayores éxitos como “Love Generation”, y, finalmente, Gigi D’Agostino, llamado por todos el capitán, que literalmente incendió el escenario de Costa Smeralda, brindando momentos de alegría y diversión a todos los huéspedes que estaban ansiosos de verlo nuevamente en escena después de un período de descanso. Estas cinco noches increíbles fueron seguidas por un mini concierto de todos los artistas dedicado solo a los huéspedes a bordo.

Pero la diversión no se detuvo allí, durante los días de Sanremo participamos en varias fiestas como el Rockmantics y el 90’s Party, y en los sets del DJ Damianito, que nos acompañó durante todo el crucero.

Pero el crucero de Sanremo también recibió a muchas otras personalidades famosas. No solo tuvimos la oportunidad de vislumbrar a algunos VIP a bordo, sino que también tuvimos el placer de asistir a un simpático Blind Test Show con la presencia del chef Bruno Barbieri y del Maestro Iginio Massari, donde los invitados, vendados, debían adivinar los ingredientes misteriosos. También participamos en The Voice of the Sea, que contó con la presencia de Orietta Berti y Fabio Rovazzi como jueces de este concurso musical.

Costa Smeralda, por supuesto, continuó con su vida normal a bordo, ya que siempre estuvieron disponibles los juegos clásicos con el personal, los espectáculos nocturnos en el Coliseo y la música en vivo en los diversos bares y salones del barco, haciendo que la experiencia de Sanremo fuera un plus para el crucero clásico.

Ahora se estarán preguntando si solo estuvimos a bordo. La respuesta es definitivamente no, ya que fuera de todas las actividades a bordo era posible reservar excursiones en lancha para visitar la ciudad de Sanremo en fiesta. Por supuesto, también fuimos, la sensación en tierra era increíble. Al llegar a la Piazza Colombo, donde estaba el escenario de Suzuki, comenzaba una larga área vallada que llevaba directamente al Teatro Ariston, lleno de gente esperando vislumbrar a sus ídolos. Pero, sobre todo, al pasear por las calles de la ciudad, se percibía esa atmósfera festiva, con artistas callejeros, manifestaciones y patrocinadores que llenaban las calles de la ciudad. Además, gracias a la presencia de muchas radios, era posible salir en busca de VIPs, encontrarse con ellos e incluso asistir a sus entrevistas.

En resumen, vivir esta experiencia fue algo único, que nos permitió experimentar este importante evento en vivo, de una manera alternativa, pero sobre todo en primera persona. Los amantes del Festival podrían pensar que lo perderían al estar a bordo, pero no es así en absoluto, porque el Festival también se transmitió en diferentes áreas del barco, brindando a todos la oportunidad de no perder ni un solo segundo, y realmente disfrutamos creando grupos de escucha, ¡porque es más divertido vivirlo en compañía! 

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Giorgia Lombardo

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