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10 de septiembre de 2022

Hemos llegado al final del relato de esta experiencia a bordo de Msc Seaside, si te perdiste las primeras partes puedes leerlas aquí à (parte 1, parte 2, parte 3).

Restaurantes de especialidades

Estamos de vuelta; Msc Seaside circunnavega la bota en sentido contrario y luego entra en el estrecho de Messina. Nos dirigimos al norte, hacia Civitavecchia. Mientras Msc Seaside pasa por el Stromboli, transcurrimos la mañana en la piscina cubierta, que parece la única solución sensata dado el mal tiempo.

A la hora de comer, el angolo etnico (rincón étnico-ahora con cocina china) es un lugar muy concurrido, tras lo cual el tiempo fluye con las actividades programadas, como “Descubre tus consejos” (a las 14:00 horas en el spa), los eventos de venta, las clases de baile y el bingo. Además, hay carteles en las puertas de las cubiertas exteriores que dicen “Vientos fuertes”. La cubierta de paseo (Promenade) está acordonada por precaución y los toboganes también están cerrados. Un paseo por el interior del barco es una buena idea, porque incluso en el quinto día a bordo se pueden descubrir rincones que se habían pasado por alto. Los restaurantes de especialidades “Butcher’s Cut“, “Ocean Cay“, Teppanyaki y Sushi Bar, que se encuentran en la cubierta 16, están tan alejados de los lugares más concurridos que uno se pregunta si alguien irá allí alguna vez.

Civitavecchia y retorno

Pasamos el último día del crucero completamente a bordo, en parte porque el tiempo vuelve a ser bueno. El sol de otoño brilla en el cielo, así que puedes revisar tu equipaje por última vez y coger los flotadores (botes inflables) para los toboganes de agua.

Msc Seaside sale de Civitavecchia a las 17:30 en lugar de a las 19:00. Esto sucede bajo el más bello sol, mientras un miembro del equipo se las arregla para detener la música a mitad de la canción por tercera vez consecutiva. El aviso de seguridad de la noche se hace de repente en un alemán aceptable. Civitavecchia es el puerto de embarque y desembarque, lo que significa más anuncios a bordo que en otros días. Sin embargo, no hay ningún evento introductorio para los pasajeros recién llegados, ni tampoco hay un evento de desembarque para todos los que dejan Msc Seaside en Génova mañana. Un cambio notable con respecto a los tiempos pre-Covid-19. El barco y la vida cotidiana a bordo son cada vez más anónimos y digitales, y los pasajeros son inevitablemente más independientes y emancipados.

The Show must go on

Después del “pollo con mantequilla india”, el camino nos lleva por última vez al teatro por la noche. “The show must go on” está en el programa justo ahí. Sin embargo, este homenaje a Freddie Mercury y a los Queen no es uno de los “momentos estelares del día”, y el espectáculo resulta en realidad una “gran desgracia”, por citar la letra de una de sus canciones. Porque si un espectáculo similar en Costa Firenze en agosto fue sencillamente fantástico, en Msc Seaside todo parece mal en esta noche de los Queen. Después de hacer las maletas, la única recompensa que se ofrece es el espectáculo “MSC Crew’s Got Talent”, en el que los miembros de la tripulación, encantadoramente seleccionados, muestran sus habilidades de baile y canto semiprofesionales.

A la mañana siguiente dejamos a Msc Seaside con los sentimientos encontrados. En términos de hardware y distribución, el barco supuso un interesante cambio respecto a las conocidas y probadas características de las clases Msc Musica, Msc Fantasia y Msc Meraviglia. Todo a bordo brillaba, relucía y resplandecía a la manera probada de MSC, y la gama de tiendas, restaurantes y cosas que hacer a bordo ciertamente rivalizaba con la de las principales líneas de cruceros estadounidenses en los años venideros. Por otro lado, no nos convenció el “software”, que representa al menos la misma parte de la experiencia del crucero. En general, la comida era mediocre en el mejor de los casos, la organización era caótica en muchos aspectos y nos faltó ese algo que distinguiera a Msc Seaside de otros barcos hasta el final. Así que no solo no había una biblioteca o una sala de juegos a la que retirarse en paz, sino que en general faltaban salas públicas en las que poder escapar de la ruidosa animación y música a bordo. Por su parte, Msc Seaside cuenta con tres buques gemelos, que seguramente aportarán buenos ingresos a MSC Cruceros en los próximos años. Sin embargo, no nos hemos tomado en serio esta clase de barcos. Tal vez lo único que necesitamos es una segunda experiencia en esta clase, porque los próximos 30-40 años seguirán ofreciendo muchas oportunidades.

Nuestra historia sobre Msc Seaside llegó a su fin, ¿te gustaría contarnos tu experiencia? Puedes hacerlo dejando una reseña en Cruising Journal.

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Kai Ortel

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